A partir del próximo mes de junio las facturas de las luz diferenciarán entre dos potencias y distintos horarios… y una mala selección o un gasto energético en horas de alto coste puede suponer un auténtico problema económico.
Son muchas las familias en España que ya han apostado por la instalación de paneles solares, olvidándose de las facturas, potencias o las conocidas franjas: punta, llano y valle. La mejor alternativa es el «autoconsumo solar», una opción rentable, sostenible, limpia y que permite ahorrar gran parte, incluso la totalidad, de la factura eléctrica.
Los paneles solares… ahorrando desde su instalación.
La idea no es sembrar de paneles solares un tejado, pasando de tener tejas a paneles. Hay que ser razonables y analizar las mejores opciones. La mejor opción es instalar paneles fotovoltaicos que permitan alcanzar al menos el 50% del autoconsumo. Para lograr esta optimización en la instalación simplemente hay que revisar el consumo de las facturas y ver las opciones. Si optamos por la locura y creamos un auténtico jardín de paneles solares la amortización de la instalación se prolongará en el tiempo. Lo más normal es que la amortización ronde los 6-9 años. Este dato revela que la inversión de unos 25 años se ha pagado en esos 6 años. Al ser una operación rentable, logramos recuperar entre un 10 y un 15% a partir del séptimo año.
Más ventajas de la instalación de paneles solares
Hasta ahora hemos hablado de una operación puramente financiera: compramos, amortizamos y rentabilizamos. No obstante, hay muchas más ventajas: la rebaja den IBI (en muchos municipios se pueden obtener bonificaciones de hasta un 50% en un período de 5 años), la rebaja de en el impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) o las deducciones en el IRPF.
Desde luego, si queremos ahorrar, consumir una energía limpia y eficiente y no caer en la locura de tener que saber qué tramos, zonas y potencias contratar… los paneles solares son la mejor opción.